La protesta de Olivia


Hoy Olivia se acercó violentamente diciéndome que no era posible que siguiéramos viviendo juntos, que al menos ella se iba, que prefería pasar pellejerías ante de seguir viviendo en esta pocilga conmigo, dijo pocilga mirándome a los ojos, como intentando recalcarlo para que me duela. Hizo un detallado análisis de nuestra relación, desde que qué comíamos hasta la forma en que nos hacíamos cariño, siempre más egoísta tú, me dijo. Se pronunció acerca de que era necesario para ella salir, ir a ver a amigas y amigos, dejar de estar tanto en casa apoyada en el balcón de la terraza viendo pasar gente, perros y gatos, que se sentía como muerta a veces. Además mi departamento es muy chico, es de los nuevos que hacen ahora, apenas cabemos los dos.

Al principio traté de defenderme, diciendo que yo trabajaba para ella, que gran parte de lo que ganaba era exclusivamente para ella, siempre le elegía cosas buenas para comer, que no le faltaba nada. Pero Olivia quería amor, más cariño y a la vez más libertad, que no lo importaba tener que ir a cazar conejos a la montaña para poder comer, mientras yo pudiera ser comprensivo y cariñoso con ella. Luego de fracasados mis argumentos, me hizo recordar de cómo yo trataba a mi ex esposa, Irene. Ella sí que podía salir cuando quisiera, me increpaba, incluso volvía más tarde que tú, se dedicaba a lo que quería y ella misma conseguía sus cosas. En cambio yo, insistía, vivo encerrada acá donde lo único que puedo hacer es mirar al espejo y pensar que este departamento es el doble de grande; Olivia se lava todo el día la cara en un acto casi reflejo.

Traté de pararme a buscar agua y se puso en mi camino. Me miró fijamente y le pregunté si podía ir a tomar agua, no me dijo nada. Al volver me seguía esperando sentada en el sillón grande que lo tenía todo rasguñado, era su favorito. Casi nunca he sido capaz de plantear mis puntos de vista de manera que valga la pena, porque titubeo y tiendo a ceder. Pero esta vez era distinto, tenía muchas derrotas amorosas y era por quedarme callado, creo yo. Así que ahora fui muy claro. Me senté frente a ella en el sillón pequeño y le dije:

- Olivia. Quisiera saber si todas estas increpaciones son para tener una respuesta o solución a lo que planteas. El caso es el siguiente. Tú partes diciendo que te vas a ir, pero sin embargo esperas respuestas para encontrar alguna solución. Por lo tanto si me has dicho que de todas maneras te vas a ir, para qué, entonces, quieres subsanar los errores, si ya no serviría de nada en tu eventual huida. Si me preguntas, yo estoy por solucionar con acuerdos entre ambos todas estas diferencias. Ahora si en realidad te quieres ir, basta con que lo hagas y nada más.

Cambió su cara, estaba impresionada, pero tal vez no por lo que le decía, sino, por el hecho de que yo era capaz de decírselo, me conocía desde siempre. Tomé un sorbo de agua con la mirada atenta de Olivia y seguí, aunque esta vez un poco más cariñoso.

-Debo decirte que si te vas la tristeza se tomaría totalmente este departamento, y que por lo mismo te digo que quiero solucionarlo. Y yo sé que ese mismo espíritu lo tienes tú también, anda ven y arreglemos esto.

La cara de Olivia ahora era de absoluta comprensión. Me dijo que la disculpara, que sí que no quería irse, yo también le pedí disculpa por mantenerla tanto tiempo encerrada. Hablamos largo rato sobre cómo serían las cosas ahora en adelante. Y claro que va a salir más con una amiga que tiene, pero en las tardes cuando yo ya esté en casa. Iremos juntos a comprar su comida y ella la va a escoger, además de que le haré todo el cariño que me demande, y eso que los gatos demandan mucho cariño. Así, la he quedado mirando largo rato, y ella me ha maullado. Se ha subido a mis piernas a revolcarse mientras yo le hago cariño en la panza. Entonces cierra sus ojos y comienza a ronronear.

Comentarios

  1. SE acosto en mis piernas sin inportarnos los demas pasajeros miestras le acariciaba su cabeza de pelo moreno.


    hjahhja los creamos como dos caras de una moneda, hasta una serie se podria hacer, yo cuando lo vi pense que era una ridicules ( mi texto no el tuyo), pero creo que bien trabajado no es tan malo.

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  2. buen cuento pero parece que hay un par de palabras mal escritas segun yo ..... pero aun así me gusto mucho ... está preciso

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  3. emersson!

    hagamos una antología, de diversos animales, te parece?, a dos manos...

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  4. Aay qué giro, me ha causado placer leer las quejas de Olivia comparandose con la exesposa Irene, sorprendente final. En horabuena Cristobal.

    Un saludo grande hasta tu casa.

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  5. q buena tobal! weno el cuento, me gustó, preciso!

    Dos cosas no más:

    Me lavo todo el día la cara en un acto casi reflejo.

    Esa frae, no es que no sea buena, pero no encuadra con el tono del dialogo, ma parece un formalismo que rompe un poco la armonía coloquial del texto. Yo le haría decir eso al narrador: Me dijo que se lavaba la cara a cada rato, como un acto reflejo.

    Es importante, porque esa frase es crucial en la construcción del engaño... de hecho podrías decir que se lava las manos, o mejor, las piernas ella misma, a cada rato... algo así...


    Lo otro:

    estas increpaciones son para tener una respuesta o solución a lo que planteas. El caso es el siguiente. Tú partes diciendo que te vas a ir, pero sin embargo esperas respuestas a tus increpaciones


    Aquí me parece que la segunda vez imprecaciones está de más, como una redundancia, peor eso ya es un detalle.,

    Weno el cuento hermano, sigue así!

    me permite estos comentarios porq son el tipo de comentarios q me espero recibir, lo amistad entre "escritores" debería mirar al ayudarse a mejorar recíprocamente!

    abrazo!

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  6. Hola, un gusto. Buena la "vuelta de tuerca"... logras que una caiga en el engaño aunque das algunas pistas para que se descubra el artilugio antes que tu lo develes. Cuando llegué al final me dije: AH! era una gata!... y volví a leer y me di cuenta que pasé por alto por ejemplo el detalle de los conejos... aunque la clave precisamente es la ambiguedad... pues Olivia Mujer también pudo haber dicho eso. Creo, en realidad que la clave está en la palabra Protesta... actitud muy femenina esa de andar reclamando sobre todo a la pareja. En la mitad del texto quise decirle a Olvia: Oye, ¿porque le pides a él que te arregle la vida?.
    ¿No fue acaso -en el fondo- una protesta del narrador ante la actitu de protesta femenina?
    Otro aspecto que me gusta de tu relato es la moraleja que tiene, sobre todo en un mundo donde construir el amor de pareja parece cada vez más imposible.

    Te dejo un saludo fraterno desde el confín austral!

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  7. GRACIAS POR LOS COMENTARIOS Y CRÍTICAS!
    A TODOS, GRACIAS!

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  8. Jajajajaja... genial!
    Simplemente genial!
    Excelente técnica, galante creación.

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  9. Tobalito.
    Me doy la bienvenida a este blog. En esta noche de lunes -lunætica- necesitaba literatura y la encontré. Quería emoción, y la tuve. Ansiaba oír una historia, y la oí desde mi propia voz pero con tus palabras.
    Gracias.

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  10. igual caché ke era una gata
    lo sospeché por ke se miraba en el espejo
    porke podría cazar conejos

    está bonito y bien escrito

    me recuerda a Cortazar

    saluitos amigo

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  11. Buena, Nakata.
    Me gusta la ambigüedad del cuento, incluso podrías alargar un poco más el final para prolongar la duda del lector.
    Otra cosa que me encanta es la fina observación que has hecho de los hombres-solos que viven con gatas, tenía un novio que era así con su gata, la gata lo manipulaba, le sacaba cosas en cara y después lo seducía clavándole las uñas en las piernas y mirándome con cara de "es mío, maldita". Para qué decir que yo me moría de los celos. Sobre todo en la soledad, se crea una relación muy rara entre ellos y los hombres-solos se desviven por sus gatas...recuerdo que este hombre prefería comer él atún en tarro pero darle la comida orgánica para gato con carne bio de mejor calidad a la gatita y por cierto, usaba unas estrategias psicológicas con "ella" que ya me las hubiese querido para mí (lo que también se observa en tu cuento, como que la relación persona-gato es más madura y amorosa que la persona-persona)...sufría tanto el pobre cuando "ella" se trataba de escapar.
    En fin, me he reído mucho con el cuento y he recordado cuando yo misma competía por el amor de un hombre con una gata jajjajjajjjajjajaja
    Sólo el final es un poco abrupto, ahí se te acelera mucho el ritmo y podrías tal vez darle un poco más de espacio para imitar así la cadencia gatuna.

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